Desbordado
No es sólo que haya estado muy ocupado librando mi batalla particular contra la tesis, terminando la antología y dando clases de Estética más allá de lo que me correspondía por enfermedad de la profesora titular hasta que se ha acabado el curso. Es que encima, se me rompió el ordenador hace unos días -un problema de Windows en el arranque, menos mal que no era nada físico, porque en un principio lo parecía. Gracias a Calixto, que es un genio y que tiene la maldición de los médicos y los informáticos amigos (que recurrimos a ellos sin rebozo en una urgencia sin contar con lo que están haciendo), ya gozo de él otra vez después de que me rescatara los datos y formateara el disco duro. Mi agradecimiento público para él.
Puedo decir que he concluido la antología: la estamos corrigiendo; ha sido a costa de un retraso gordo en la tesis -como si se me hubieran colado persas por un resquicio del paso- que estoy tratando de recuperar, pero tengo que admitir que ahora, al verla concluida y constituir un posible nuevo libro publicado (en estas cosas nunca hay seguridad completa hasta que no lo tienes entre las manos), aunque sea un libro vicario, pues me da mucha alegría... Por cierto, por fin se me ocurrió un título, tras mucho darle vueltas infructuosamente: El paisaje heredado. La explicación vendrá en la introducción-estudio que he hecho. El subtítulo sí lo tenía ya: La presencia de Juan Ramón Jiménez en cuatro poetas granadinos. (Quizá se queden en tres: voy a proponerlo).
También puedo decir que ha aparecido publicado un artículo mío, del que creo que os hablé, sobre las relaciones entre Virginia Woolf y Elena martín Vivaldi en el suplemento de homenaje a ésta última que ha editado la revista El Fingidor. El suplemento ha quedado muy cuidado y precioso, por el gran trabajo de Pepe Gutiérrez y mi amiga Sonia (no sé si entre otros): a mí me han adjuntado de motu proprio en el artículo una foto de Virginia Woolf y otra de Martín Vivaldi muy al caso, donde casi se atisba un parecido, que ha quedado muiy bien. Los de aquí podéis adquirirlo junto con la revista, a la venta en Babel, Picasso, Atlántida y Teorema. No obstante intentaré escanearlo (es de gran formato). Por cierto que también se ha inaugurado en la Biblioteca del Hospital Real, de nuevo por el centenario, una exposición muy interesante e con documentos, libros fotografías etc. de Elena Martín Vivaldi; tiene cosas muy curiosas e interesantes así que pasaos si podéis, que os gustará. También ha estado al cuidado de Pepe Gutiérrez y Sonia; de hecho han planteado el suplemento y la exposición como un todo, titulado igual, con un verso de Martín Vivaldi: Reflejos de un asombro.
No creo que pueda contestar a las entradas que habéis ido haciendo, pero las he leído. Tampoco creo que pueda mantener un ritmo normal de entradas -esto es, mi ritmo anormal pero previsible-. Al final he decidido que hasta que dure la tesis y salvo periodos improbables de menos trabajo, mi blog adquirirá un perfil característico muy propio de cierto tipo de bloggers: me limitaré a enlazar artículos o vídeos que me parezcan interesantes, o algo similar. No sé. Todo por no perder el contacto con vosotros.
P.S.:
bodonisans también hace que no comparece porque ha estado enfermo: entre una muela del juicio extraída que le ha dado molestias posoperatorias y un virus extraño ha estado fastidiado y débil. Se va recuperando. Por si fuera poco, su madre tampoco se encuetra demasiado bien, aparte de por dolencias habituales porque también cogió el virus. Por eso, para consternación de los figurantes, no está en la estupenda foto histórica que hizo
aseituno.
Puedo decir que he concluido la antología: la estamos corrigiendo; ha sido a costa de un retraso gordo en la tesis -como si se me hubieran colado persas por un resquicio del paso- que estoy tratando de recuperar, pero tengo que admitir que ahora, al verla concluida y constituir un posible nuevo libro publicado (en estas cosas nunca hay seguridad completa hasta que no lo tienes entre las manos), aunque sea un libro vicario, pues me da mucha alegría... Por cierto, por fin se me ocurrió un título, tras mucho darle vueltas infructuosamente: El paisaje heredado. La explicación vendrá en la introducción-estudio que he hecho. El subtítulo sí lo tenía ya: La presencia de Juan Ramón Jiménez en cuatro poetas granadinos. (Quizá se queden en tres: voy a proponerlo).
También puedo decir que ha aparecido publicado un artículo mío, del que creo que os hablé, sobre las relaciones entre Virginia Woolf y Elena martín Vivaldi en el suplemento de homenaje a ésta última que ha editado la revista El Fingidor. El suplemento ha quedado muy cuidado y precioso, por el gran trabajo de Pepe Gutiérrez y mi amiga Sonia (no sé si entre otros): a mí me han adjuntado de motu proprio en el artículo una foto de Virginia Woolf y otra de Martín Vivaldi muy al caso, donde casi se atisba un parecido, que ha quedado muiy bien. Los de aquí podéis adquirirlo junto con la revista, a la venta en Babel, Picasso, Atlántida y Teorema. No obstante intentaré escanearlo (es de gran formato). Por cierto que también se ha inaugurado en la Biblioteca del Hospital Real, de nuevo por el centenario, una exposición muy interesante e con documentos, libros fotografías etc. de Elena Martín Vivaldi; tiene cosas muy curiosas e interesantes así que pasaos si podéis, que os gustará. También ha estado al cuidado de Pepe Gutiérrez y Sonia; de hecho han planteado el suplemento y la exposición como un todo, titulado igual, con un verso de Martín Vivaldi: Reflejos de un asombro.
No creo que pueda contestar a las entradas que habéis ido haciendo, pero las he leído. Tampoco creo que pueda mantener un ritmo normal de entradas -esto es, mi ritmo anormal pero previsible-. Al final he decidido que hasta que dure la tesis y salvo periodos improbables de menos trabajo, mi blog adquirirá un perfil característico muy propio de cierto tipo de bloggers: me limitaré a enlazar artículos o vídeos que me parezcan interesantes, o algo similar. No sé. Todo por no perder el contacto con vosotros.
P.S.:
bodonisans también hace que no comparece porque ha estado enfermo: entre una muela del juicio extraída que le ha dado molestias posoperatorias y un virus extraño ha estado fastidiado y débil. Se va recuperando. Por si fuera poco, su madre tampoco se encuetra demasiado bien, aparte de por dolencias habituales porque también cogió el virus. Por eso, para consternación de los figurantes, no está en la estupenda foto histórica que hizo
aseituno.