[Fanfic] Crónica de un Divorcio Anunciado. Capítulo 4

Sep 30, 2012 17:21




Titulo: Crónica de un Divorcio Anunciado.

Autora: alexandranavahl

Artista: destielwinchi

Beta:letyourhategrow

Multifandom/Crossover: True Blood/AFI (A Fire Inside) - White Collar/AFI - TVD/House - Harry Potter.

Rating: NC-17

Pareja(s): Alexander Skarsgard/Davey Havok, Ian Somerhalder/Olivia Wilde, Tom Felton/Daniel Radcliffe, Davey Havok/Matt Bomer, Alexander Skarsgard/Cillian Murphy, Ryan Gosling/Davey Havok (Mención)

Adevertencias: Obviamente sexo m/m. Mención de violencia, pedofília. Engaños, azúcar. Palabras malsonantes. P0rn. Guarradas.

Número de palabras: 38.400 aprox.

Resumen: Davey Havok es el prototipo de hombre gay que puedes conocer, es un diseñador de bodas más afamado de este siglo, tiene éxito en su trabajo, lleva seis meses de divorciado de Alexander Skarsgard; un militar retirado que tiene mucho trabajo en ser jefe de SWAT para haberle dedicado tiempo a su pareja. Havok lleva tres meses saliendo con el mejor publicista del mercado: Matthew Bomer y también lidiando con un ex arrepentido. Él volvió una moda las fiestas de divorcios al haber empezado diseñando su propia fiesta de divorcio y no dará su brazo a torcer cuando le han roto el corazón, tiene el apoyo de su mejor amiga Olivia Wilde que a su vez es su asistente, de su mejor amigo Daniel Radcliffe y el apoyo incondicional de su novio Matt, pero ¿Que tan insistente y desenfrenado puede ser Alexander por conseguir de nuevo a Davey y que tan lejos puede llegar para volver a ser alguien en su vida? Pueden preguntarle a Ian Somerhalder o Tom Felton, de seguro responderán. Diseña un divorcio pero ¿No puedes volver a diseñar su boda después de tu propio divorcio? Davey está cien por ciento seguro que no volverá a casarse ¿Matt piensa lo mismo? Alexander al menos no se dará por vencido.

CAPÍTULO IV

Don't let memories go
of me and you
the world is down there
out of view
Please don't jump

Don’t Jump - Tokio Hotel.



Hacía horas había salido de la casona donde Ian anunciaba su compromiso. Tenía que despejar la cabeza porque dolía que Davey supiera que le había puesto los cuernos y no le hubiera dicho ¡Joder! Havok era capaz de explotar por una pequeñez y por eso no armó un drama, no dijo nada y sólo se lo calló ¿Justo? No era nada justo porque si le hubiera dicho nada de eso estuviera pasando en esos instantes, estarían felizmente casados aún y si un Matt “Don Perfecto” Bomer en su camino.

Desde que se había despedido de Ian y Olivia con una disculpa de que tenía un compromiso de improviso, había salido sin despedirse de más nadie y llevaba horas dando vueltas en su motocicleta mucho tiempo después de que la noche había caído. Decidió ir a un conocido bar ‘de ambiente’ como recurrentemente le llamaban a los bares gays. Nunca lo hacía porque no le gustaban los bares de esa recurrencia, él y Davey siempre acordaban los bares normales o mixtos a donde salían por una copa y jugaban un rato haber quien flirteaba un poco y se iban pasada la media noche. Solo eso pero ahora si quería flirtearse y llevarse a un chico al baño o a donde fuese; tenía que descargar esa necesidad que sentía. Hacía años no estaba así de necesitado de sexo recurrente.

Mints and coffee, era un bar gay que tenía dos meses de abierto. Lo había visto de vez en cuando y estar allí entrando en sus estridentes paredes aprecia una mala fantasía. Todo el mundo sabía de qué pie cojeaba Alexander y eso era Davey, nadie había hecho un escándalo cuando un crío casado con otro crío había adoptado la seguridad de la ciudad porque simplemente eran los ‘hijos del ministro y vice-ministro de Defensa del país’ a veces pensaba que eran muy poco originales y que las personas eran unos lameculos de la burocracia pero eso a él no le importaba en lo más mínimo; en su tiempo de cadete le importaba el ‘qué dirán’ pero ahora solamente le importaba que no le tocaran el orgullo, las agallas, las pelotas o a Davey. Eso era todo.

El bar estaba atestado de hombres y mujeres todos con parejas del mismo sexo o en casos como él que buscaba una presa fácil con quien tener una follada rápida y sólo eso. Se acercó a la barra donde se encontraba dos chicas embutidas en unos jeans que al menos serían dos tallas menos que las suyas y blusas que no le dejaban a Alexander nada para su estimulante imaginación. Arrugó un poco la nariz pasando por alto ese detalle y pidió un whisky doble en las rocas, el cual llegó presto a sus manos en unos minutos.

Echó una mirada sobre el local, había para todos los gustos, desde mujeres que tenía más pintas masculinas que femeninas y hombres que definitivamente podrían pasar por mujeres; pero los dejó pasar, había conseguido su objetivo en un chico de ojos tan azules como los suyos, el cabello semi largo hacia los hombros. Él no se le iba a escapar y de eso estaba seguro, se le acercó con paso firme hasta la banca de roble que tenía cerca de la barra.

- ¿Puedo? - le preguntó con una sonrisa flamante.

-       - Seguro, no hay nadie en ella - el chico inclinó la cabeza mostrando sus mejillas teñidas de un perfecto color rosa y labios rojos. Perfecto.

Alexander se sentó al lado del chico con suavidad. Le sonrió de forma depredadora con claras intenciones de que allí abría algo más mucho más de lo que prometía esa noche, esa larga noche. Se toó su whisky y miró al hombre que ahora si le daba la impresión que tendría más o menos su edad.

- Por cierto - sonrío extendiendo una mano - Soy Alexander, Alexander Skarsgard.

-       - Lo sé - le dio la mano con suavidad - Cillian Murphy - le sonrió - Todos aquí te conocen por si no lo has notado.

-      - Bueno si, pero igual tenía que presentarme - le sonrió de medio lado - Entonces ¿Bailas Cillian? - inclinó la cabeza hacía la pista de baile y extendió de nuevo una mano hacía su ahora, acompañante.

-       - Claro, ¿por qué no? - sonrió Murphy de manera enigmática, solo que para Alexander pasó desapercibido.

Esa noche era un repertorio completo de Muse, y para suerte de Alexander se sabía al menos la mitad de sus canciones por el gran fanatismo de Davey hacia la banda, de un momento a otro le dio una oleada de nostalgia el no tener a Davey allí cantando toda la canción mientras bailaba con él como si no hubiera fin, pero esos días ya no serían. Time is running out, era la canción que sonaba por todo el bar por lo que Alexander tomó de la cintura a Cillian quien inmediatamente dejó sus manos en el cuello de Skarsgard bailando increíblemente bien.

Estuvieron bailando o al menos a su parecer restregándose un poco durante tres canciones completas donde la voz del vocalista de Muse le llenaba los sentidos; a veces cerraba los ojos y su mente desdibujaba a Cillian para colocar en su lugar a un hombre lleno de tatuajes, corte de cabello estrafalario y su pañuelo de colores del arcoíris o uno de un color muy chillón para su gusto. Con ese pensamiento, había inclinado la cabeza y besado con suavidad a Murphy como si la vida le fuera en ello, presionándolo contra su cuerpo mientras el otro se hacía una masa temblorosa y gemía contra sus labios.

El destello de las luces de la discoteca contra los brazos que conocería de toda la vida lo sacó de su ensimismo. Davey estaba al menos tres parejas más alejadas de él bailando con lentitud contra el cuerpo de Bomer que lo miraba por sobre el hombro de Davey con una mirada indescifrable. Alexander frunció el ceño y paso de ellos, ya no quería ni pensar en ellos así que volvió a cerrar los ojos bailando con Cillian al song de New Born. Odiaba con toda su alma a Matthew Bomer pero si su Davey lo amaba, él se apartaría de su vida. La canción había comenzado con la voz de Bellamy cuando el tibio cuerpo de Cillian le había sido arrebatado y en su lugar se situaba Bomer quien le había echado los brazos al cuello tal cual niña. Frunció el ceño e iba a mandarlo muy a la mierda cuando miró la cara de desconcierto de Davey que le tocó bailar con su ligue de esa noche, maldito Bomer y maldito Davey en el momento que se interpusieron con su ligue.

- ¿Qué mierda crees que estás haciendo? - reclamó tomando con brusquedad la cintura del castaño.

-      - Más te vale que no pienses llevarte a la cama a ese fenómeno con el que bailas, Skarsgard - Matt ladeo la cabeza con una expresión seria - Mejor aléjate de él.

-       - ¿Quién carajo eres para decirme a quien me follo o no? - gruñó como un animal, apretando innecesariamente al publicista - Si él me lo pide, dime ¿Qué me impide que le de lo que me pide?

-      - Soy alguien que sabe lo que dice y lo que quiere ¿No ves? - preguntó con suavidad - Vine aquí a celebrar mi compromiso - sonrió cuando Alexander se tensó tanto que pensó que se iba a romper.

-       - ¿Qué compromiso?

-      - Acabo de pedirle matrimonio a Davey y adivina… Aceptó - Bomer tenía de nuevo esa expresión inexplicable para Alexander - Así que como verás, sé lo que quiero y por ende sé lo que digo. Aléjate de ese tipejo - y sin más, Bomer se alejó de Alexander y apartó a Davey para bailar con Cillian Murphy.

Alexander frunció el ceño, estaba un poco achispado por todo el alcohol que había consumido en la fiesta de compromiso de Ian, la noticia de que su buen ex volvería a contraer nupcias y el extraño comportamiento de Bomer le bloquearon al menos, algunas otras neuronas por lo que tomó con brusquedad a Davey acercándolo para bailar, Bliss.

Davey se removió incomodo, no quería bailar con Alexander ni nada por el estilo pero Matt no le había dado más opciones, frunció el ceño y le dirigió una mirada cargada de significados que Alexander había aprendido a reconocer como: Tú y yo vamos a hablar después de esto. El organizador de bodas y fiestas de divorcios, le echó los brazos al cuello al rubio que sonrió como acto reflejo después de haber pensado que no pasaría por eso de nuevo. Le pasó un brazo por la cintura, descolocando un poco a Havok, quien comenzó a moverse a compás de la música alternando su mirada entre Matt y Alexander.

- Dime que fue eso - había ordenado que le explicara.

-       - No sé Davey, ¿No te diste cuenta que él fue quien se acercó? - Alexander metió una rodilla entre las piernas de Havok, que automáticamente las abrió y después se odio por eso.

-     - No hagas eso - siseó con odio - Y Mattie, con solo verte con ese que bailabas se acercó. No sé por qué - murmuró suavemente.

-        - ¿Un ex novio, tal vez? - preguntó con malicia.

-        -  Nop, le conozco sus exnovios - respondió Davey seguro de su mismo.

-        -  ¿Eso es posible? Digo, conocer a todos los exnovios de alguien y más siendo tan atractivo como él - preguntó Skarsgard.

-        -  Yo conozco a todos y cada uno de tus ex, desde hombres a mujeres - frunció el ceño molesto.

-        -  O sea que, aún piensas que soy atractivo - sonrió Alexander.

-        -  Eres un incordio - gimió de frustración - No, no pienso que eres atractivo sino que eres lo peor que me paso en la vida ¿Feliz?

-        -  No - lo apretó contra su cuerpo haciéndole crujir la espalda - Porque tú eres lo mejor que me paso - se inclinó sobre Davey para besarlo, sin éxito.

-        -  Estas ebrio - masculló Davey arrugando la nariz - Y ni se te ocurra intentar nada…- la canción terminó y Davey sonrió con petulancia - Adiós Alexander, te dejo con tu ligue que yo me voy con mi… prometido.

Alexander frunció más el ceño si podía viendo a Davey perderse con su prometido entre las personas, pero la tibia presencia de Cillian que le tomó una mano y le sonrió como si nada hubiera pasado, lo calmó de forma extraña. Murphy se equilibró en sus pies hasta llegar y besar suavemente a Alexander, lo que lo desconectó de su cerebro y le recordó que él no estaba allí para lamentarse sino para follarse a ese tibio cuerpo que se pegaba a él, lo que pensara e hiciera Bomer lo tenía sin cuidado y ¿Era lo que peor que le había pasado a Davey, no? Pues que se jodiera mucho también, que se jodiera el mundo porque él ya no quería saber de este. Tomó a Cillian de la mano jalándolo entre la multitud, ya había esperado mucho, meses en realidad como para seguir esperando para follarse lo primero que se le atravesara. ¿Sutileza? ¿Para qué? Si Cillian sabía por lo que iba.

Lo arrinconó contra la puerta del baño, besándolo hasta casi follarle la boca con la lengua mientras sus manos sacaban la camisa de los jeans ajustados que tenía Cillian. Empujo la puerta del baño tomando del culo a Cillian alzándolo hasta dejarlo sentado en el granito negro del baño apoyado contra el espejo mientras él no le daba salida. Murphy era un manojo de nervios que se arqueaba contra el calenturiento cuerpo de Alexander y gemía incoherencias incitándolo a ir cada vez más rápido. El castaño se incorporó solo para buscar la bragueta de los jeans de Alexander mientras este acababa con los botones de su costosa camisa, desgarró la camisa y enterró el rostro en el agujero que Cillian tenía en el final de la garganta donde podía sentir más que ver el pulso acelerado de su amante. Mordió, chupó y succionó a placer su pulso abriéndole los pantalones sumergiendo una mano en los bóxers de Murphy tomando su pulsante erección. Alexander se regocijo del gemido necesitado de Cillian que se retorció a placer y cerró una mano sobre el miembro de Skarsgard que gruñó como un animal herido en respuesta.

Alexander se dejó masturbar con placer mientras su cuerpo temblaba de anticipación pero su conciencia le gritó que él no estaba ahí para terminar como un vil quinceañero con una masturbación barata. Buscó entre sus pantalones caídos un pequeño frasco de lubricante tomando en una mano mientras con la otra se echaba las piernas pálidas de  su amante a los hombros. Abrió el lubricante con la boca en una acción que se le antojó deliciosamente sexy a Cillian que gimió de anticipación viendo como Alexander vertió gran cantidad de la viscosa mezcla y comenzó a tantear su entrada. Con un digito Cillian se tensó como una cuerda.

- Relájate - murmuró Alexander con suavidad moviendo el dedo en su interior - Solo relájate.

Cillian asintió respirando profundo sintiendo ese dedo intruso en su interior relajándose hasta que el segundo entró con facilidad y el tercero lo tenía viendo las estrellas cada vez que rozaban su próstata. De un momento a otro estaba empalado por Alexander que se había quedado estático, como sumergido en el tiempo. Murphy se abrazó al tibio cuerpo de Alexander relajándose hasta que hondeo las caderas estimulándolo a seguir penetrándolo.

Alexander comenzó con un ritmo lento y tortuoso pero su cuerpo deseaba poseer a un mayor grado a su amante por lo que comenzó a embestirlo con más fuerza entrando y saliendo de él con certeras estocadas haciendo que la cabeza del castaño rebotara varias veces contra el espejo del baño y sus gemidos comenzaron a acompasarse tanto que no se dieron cuenta cuando la puerta del baño se abrió dejando entrar a un sorprendido Davey Havok.

Davey abrió mucho los ojos viendo a Alexander follarse duro al que le parecía, su ligue de la noche. Sacudió la cabeza y siguió hasta el lavamanos más alejado de ellos, abrió el grifo lo más que pudo y trato de ignorar deliberadamente los gemidos que le estaban atormentando los oídos. Limpió el pequeño desastre de sus manos cuando una chica le había tirado una copa de vodka en ellas. Se lavó el rostro solo para quedarse de piedra cuando observó a Alexander mirándolo contra el reflejo del espejo. Alexander sonrió y se lamió los labios mirando a Davey, Cillian se retorcía y gemía con los ojos cerrados con las manos sobre los hombros de Alexander. Skarsgard cada vez arremetía con más fuerza contra el calor que lo envolvía sin quitarle los ojos a Havok contra el espejo. Sentía como el clímax se le estaba arremolinando en la parte baja del vientre, una estocada fuerte hizo que Cillian se corriera con fuerza tal que había salpicado el rostro de Alexander y la presión alrededor de su miembro lo había llevado a correrse con fuerza, antes de cerrar los ojos había observado como Davey se enderezaba. Cuando los volvió a abrir, él y su amante estaban solos en el baño, sin Davey. Cuando había salido perfectamente acompañado de Cillian que se había pegado de él como una lapa, no había rastros ni de Matt Bomer ni de Davey Havok. Alexander sonrió de medio lado, preguntándose qué había dicho Davey para salir como alma que lleva el diablo del establecimiento con su nuevo prometido.



Alexander había terminado esa noche en su habitación con dos folladas más y un Cillian Murphy exhausto y abrazado a su costado; por eso no entendía porque carajos su celular estaba sonando tan insistentemente reventándole la cabeza por la resaca que estaba comenzando a despertarle. Estira un brazo buscando su móvil y en el proceso tirando su despertador al suelo. Parpadeó varias veces viendo el nombre de Tom Felton titilar en su BlackBerry, frunció el ceño y contestó.

- Más te vale que sea algo bueno porque tengo una resaca de los mil demonios y no pienso levantarme por estupideces.

-     - Alex - la voz de Tom se estaba quebrando de nerviosismo, Alexander frunció más el ceño - Es Davey - susurró y al fondo Alexander estaba seguro que escuchaba a alguien llorar.

Como un resorte e ignorando como su habitación daba mil revoluciones por segundo; buscó atiendas en la oscuridad unos bóxers y un par de pantalones sosteniendo con móvil con el hombro.

- ¿Qué le sucedió? - preguntó con esa voz fuerte y autoritaria que le caracterizaba.

-      - No lo sabemos bien - murmuró - Sólo sabemos que él y Matt chocaron contra una isla en la autopista y el auto dio vueltas hasta salirse del carril.

-        -  Maldita sea ¿¡Esta o no bien!? ¡Eso es lo que me interesa Felton!

-        -  Hasta ahora no sabemos de Davey - tragó saliva - Matt sólo tiene contusiones y unas costillas fracturadas, pero Davey era quien manejaba Alex… Y llevaba el alma que se lleva el diablo - suspiró esperando la tormenta que sabía que se avecinaba.

-         - ¡No me interesa ese hijo de puta! Me interesa mi esposo - jadeó de rabia por no saber más y colgó.

Para ese momento Cillian ya estaba más que listo para salir y tenía en las manos la camisa que había tenido Alexander esa noche.

- Lo siento pero me tengo que ir, si quieres te puedo dejar en el camino - había dicho tomando su camisa de manos del castaño que lo miraba con una sonrisa suave.

-      - Ni que estuviera loco - sonrió Cillian besándolo con suavidad - Yo te acompaño porque estas muy alterado y no creo que sea conveniente que manejes así, no te preocupes - le dirigió una mirada que no aceptaba replicas.

Alexander asintió, estaba muy nervioso como para manejar y las ideas se arremolinaban en su mente una peor que la otra ¿En que estaba pensando Davey al manejar alterado? Maldito desconsiderado que lo iba a matar si no estaba muerto, sacudió la cabeza alejando esos pensamientos. Salió de su departamento como alma que lleva el diablo seguido por Cillian quien le había arrebatado las llaves de su auto de un manotazo por lo que ahora ir del lado del copiloto le incomodaba un poco.

El hospital donde iba era el más cercano a la autopista, las manos le temblaban y sudaba frío mientras Murphy manejaba lo más rápido que podía. Cuando llegaron al estacionamiento del hospital, Alexander no dudó dos veces en ir al trote a la recepción donde esperaba una chica de cabellos rubios que en su placa de enfermera decía: Anna Paquin.

- Buenas - medio sonrió Alexander - ¿Me puede informar en qué lugar se encuentra el señor Davey Havok?

-       - ¿Quién le busca? - preguntó la enfermera entrecerrando los ojos con suspicacia - No tengo el permiso para dejar a casi nadie.

-       -  Soy su esposo señorita - renegó Alexander cuando Cillian ya había llegado a su lado.

-       -   ¿Su esposo? - bufó - No tengo información de que el señor Havok esté casado.

-       -   Es su ex pero también la comunicación con la familia del paciente - había dicho la inconfundible voz de Michael Marchand, el hermano menor de Davey - Puede dejarle pasar - Michael observó al acompañante de Alexander y alzó una ceja - Dejarlos.

La chica sólo asintió cuando el hermano de Davey había aparecido, todo lo contrario que Alexander quien frunció el ceño y apretó la mandíbula viendo a su ex cuñado allí parado. Lo siguió de cerca consciente de que Murphy los seguía. Cuando había salido del ahora de recepción por un elevador, contó hasta sesenta cuando el elevador abrió en el tercer piso de la clínica. Tomó de la camisa a Michael y lo empotró contra la pared más cercana.

- No sé qué haces aquí pero no me iré sin saber de mi esposo.

-      - Ex esposo, mi estimado ex cuñado - bufó Michael sin inmutarse, por lo que se podía concluir que eso pasaba seguido - Si sabes lo que te conviene me soltarás, y te tranquilizaras. No sé qué coño haces aquí pero si viniste fue por algo, además le estas dando una mala impresión a tu novio - suspiró - Y yo también.

Alexander suspiró soltando a Michael el cual hasta ahora era que reparaba en que estaba en pijama y todo mal arreglado. Suspiró mirando a Ian y Olivia que lo observaban al final del pasillo. Daniel miraba a la nada con vista vacía y Tom hacía círculos en su espalda. Alexander se sentó en el puesto más alejado de ellos, esperando con Cillian a su lado quien le pasó un brazo por uno de los suyos como si quisiera que supiera que él estaba allí. Michael se quedó mirando una ventana con expresión vacía y que Alexander calculaba que daba hacía el estacionamiento y por ello sabía que había llegado. En esos momentos no lo agradecería y nunca lo haría pero internamente dio gracias a que su ex cuñado no se hubiera opuesto a que él estuviera allí. Siendo el familiar más cercano a Dave.

Capítulo 5

Crónica de un Divorcio Anunciado, pareja: tomfelton/danielradcliffe, pareja: alexanderskarsgard/daveyhavok, pareja: ian somerhalder/olivia wilde, babybang2012

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