De kdd en kdd y Berlín
El sábado quedé con hinperyon (mi niña!!!), con lloram y con unos amigos suyos. Hablamos, hablamos, hablamos, tomamos café en el Starbucks (wiiiii), hablamos, ellos tomaron unos Bloody Marys, yo un Beso de Angel (que conste que no elegimos las bebidas por sus nombres... creo xD), quedó claro que hinperyon es toda una friki porque sabe que Mulder es un adicto a las pipas, Luis, su novio, es una máquina con el Flexi-Coco y no hubo manera de que a mi se me ocurriera la palabra "taekwondo". El "No te entiendo" se convirtió en la frase de la noche, no nos pusimos de acuerdo de si el alma gemela de Spike es Buffy o Angel (algo que era de esperar), comentamos viajes y destinos y, entre otras muchas cosas, prometí que pondría fotos de Berlín. Dicho y hecho.
Para que os hagáis una idea del frío que hacía... las calles heladas, y eso que eran más de las diez de la mañana.
Monumento al Holocausto Judío. Bloques y bloques alineados de hormigón. Sobrecogedor el silencio que hay.
La Puerta de Brandemburgo. Im-pre-sio-nan-te.
Y al ladito de la puerta de Brandemburgo está el Reichstag, sede del Bundestag alemán (el parlamento, mismamente)
El Reichstag tiene arriba una cúpula de cristal a la que se puede subir. Las vistas de Berlín desde allí son increíbles. Tan increíbles que creo que fue lo que mas me gustó.
El Checkpoint Charlie, el puesto fronterizo por el que se cruzaba del sector americano al sector ruso.
Postdamer Plazt. Una plaza modernísima con rascacielos construidos a raíz de la caída del Muro, que cruzaba por en medio de la plaza.
Un trozo del Muro (queda bastante, no creáis) y la torre de televisión de Alexander Platz.
Y por supuesto no podía faltar fotos de los semáforos bwajajajajajajaja. El muñequillo este, el Ampelmann, es todo un símbolo en la ciudad. Hay pins, tazas, camisetas, sacacorchos, esponjas, vasos, abrebotellas... gominolas... todo lo que os podáis imaginar de él, por todos los sitios, mas que de ningún otro monumento, seriously.
El que pueda ir, que vaya. Merece la pena.
Para que os hagáis una idea del frío que hacía... las calles heladas, y eso que eran más de las diez de la mañana.
Monumento al Holocausto Judío. Bloques y bloques alineados de hormigón. Sobrecogedor el silencio que hay.
La Puerta de Brandemburgo. Im-pre-sio-nan-te.
Y al ladito de la puerta de Brandemburgo está el Reichstag, sede del Bundestag alemán (el parlamento, mismamente)
El Reichstag tiene arriba una cúpula de cristal a la que se puede subir. Las vistas de Berlín desde allí son increíbles. Tan increíbles que creo que fue lo que mas me gustó.
El Checkpoint Charlie, el puesto fronterizo por el que se cruzaba del sector americano al sector ruso.
Postdamer Plazt. Una plaza modernísima con rascacielos construidos a raíz de la caída del Muro, que cruzaba por en medio de la plaza.
Un trozo del Muro (queda bastante, no creáis) y la torre de televisión de Alexander Platz.
Y por supuesto no podía faltar fotos de los semáforos bwajajajajajajaja. El muñequillo este, el Ampelmann, es todo un símbolo en la ciudad. Hay pins, tazas, camisetas, sacacorchos, esponjas, vasos, abrebotellas... gominolas... todo lo que os podáis imaginar de él, por todos los sitios, mas que de ningún otro monumento, seriously.
El que pueda ir, que vaya. Merece la pena.