He vuelto

Jul 12, 2015 13:27

Pues resulta que ayer después de escuchar debatir largo y tendido sobre Grecia, desde la más radical de las izquierdas, me trajeron a casa en coche. Al girar una calle, casi atropellamos a un gato, pero frenamos a tiempo. Entonces me di cuenta de que había otro gatito mucho más pequeño en el asfalto. La madre había salido corriendo, pero como frenamos, volvió a por el pequeño. Le agarró por el pellejo del cuello y le arrastró hasta la acera. Esperamos hasta que el pequeño fue capaz de subir al bordillo. Christian incluso apagó las luces para no deslumbrarlos. No se me quita de la cabeza la mirada de pánico de la madre, cruzando la calle para coger a su hijo, con miedo a que nos los llevásemos por delante. Tampoco logro apartar la idea de que en un primer momento, cuando giramos la calle, la madre salió corriendo y dejó al pequeño solo en la carretera. Supongo que pesó más el instinto de supervivencia. Supongo que una madre puede tener más gatitos. Supongo que quizá no sería el primero que perdía, porque es extraño que fuera por la calle con uno solo. Pero en cómo lo abandonó y cómo volvió a por él, y en el miedo de sus ojos, reconozco rasgos casi "humanos", casi como si tuviéramos cosas en común.

Y pienso que si no nos hubiésemos dado cuenta a tiempo, habría uno o dos gatitos menos en el mundo Qué más dará, con todos los que hay. Pues importa. Porque temen y sufren y a veces deciden ser valientes. Algunos de nosotros nunca llegaremos a eso.
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